Mayuko BANDO, la fundadora de los Dojos SHIDOKAN.
Hace unas semanas hemos publicado una Nota sobre la experiencia emprendedora de la Sensei Mayuko BANDO (1977; 5to Dan Kodokan) quien tras retirarse de las competencias a los 26 años y emplearse por varios años en distintas empresas privadas, fundó su propia empresa que actualmente maneja dos dojos de Judo nada menos que en Tokyo. Resulta muy interesante conocer la labor que viene desarrollando BANDO en el frente de su empresa y sus Dojos con el fin de diferenciarse de otros dojos, agregando valor a los servicios que brinda en un sector donde gran parte de actividad transcurre en el ámbito colegial y universitario, particularmente siendo mujer y no teniendo un nombre conocido por haber sido campeona olímpica o mundial.
Mayuko BANDO
Casualmente, también la sección del Comité de Promoción del Judo Femenino dentro de la Página Oficial de la Federación Japonesa de Judo (AJJF) que viene presentando a distintas figuras del Judo Femenino en forma de “posta” desde agosto de este año, publicó una entrevista a Mayuko BANDO quien tomó la posta de la séxtuple campeona nacional (libre de peso) y compañera en el Comité de Promoción del Judo Femenino recientemente creada en la Federación de Judo de Tokyo, Yoko TANABE y la pasó a su amiga y ex compañera de equipo en el Campeonato Mundial Universitario 1998, Mayumi HIROKAWA. La entrevista a BANDO cumple ampliamente con el principal objetivo de la sección que es el de dar a conocer distintas experiencias de judokas mujeres, tras el retiro de las competencias, ya que el tema de la planificación de la carrera posterior al retiro es una de las principales preocupaciones del comité.
A continuación, se extractan algunas partes de la entrevista que permiten conocer mejor a BANDO y su experiencia:
He fundado la sociedad anónima SHIDOKAN en agosto de 2013 y en octubre del mismo año abrí el primer dojo, “Bunbu Ichido Juku SHIDOKAN-YOTSUYA DOJO”, y en abril de 2019, el segundo dojo, “Bunbu Ichido Juku SHIDOKAN-KONAN DOJO”. Ya que considero que es un caso atípico que una sociedad anónima esté manejando 2 dojos de Judo, me referiré principalmente a mi “carrera” hasta llegar hasta aquí.
He iniciado la práctica del Judo estando en el primer año de la escuela secundaria inferior y una vez graduada en la universidad, ingresé a la Policía Metropolitana de Tokyo para integrar su equipo de Judo y seguir compitiendo.
Al retirarme de las competencias a los 26 años, tenía la opción de seguir en la Policía Metropolitana de Tokyo cumpliendo funciones como agente policial, pero a los 27 años, dejé la Policía para ingresar a una empresa privada.
Durante los 8 años desde que dejé la Policía Metropolitana de Tokyo hasta fundar mi propia empresa a los 35 años, he trabajado en distintas empresas privadas, cumpliendo distintas funciones, tales como la promoción de ventas en una PYME hasta la promoción de ventas y gestión comercial en una compañía multinacional de seguros.
Debido a que el hecho de empezar a trabajar en una empresa a los 27 años significaba hacerlo con varios años de retraso respecto al común de la gente que ingresa a los 22 o 23 años, inmediatamente después de egresar de la universidad, traté de esforzarme en el trabajo con el fin de reducir la brecha por esa menor experiencia que tenía frente a personas de la misma edad y avanzar en mi carrera profesional.
Estando a cargo de la formación de recursos humanos en la promoción de ventas de la compañía de seguros, me interesé en la formación de generaciones más jóvenes y niños y después de haber pensado en distintas alternativas, fue que llegué a la decisión de “volver al Judo”. Y, en el año 2020, llegué a mi octavo año a cargo de mi empresa.
Los 8 años de experiencia en empresas privadas me permitieron ampliar mi perspectiva y adquirir distintas habilidades que me permitieron tomar la decisión de iniciar un emprendimiento propio y sostenerlo a pesar de los inconvenientes como los que estamos atravesando a causa de la actual pandemia del COVID-19.
Cuando me retiré de las competencias, lo hice sintiendo una gran frustración por no haber podido cumplir con los objetivos deportivos que me había trazado. Si bien aún ahora, suelo sentir dicha frustración, el hecho de saber que había hecho todo lo que estaba a mi alcance para alcanzar los objetivos, me ha dado una gran confianza que todavía me acompaña.
Aún el mejor de los deportistas, indefectiblemente, en algún momento debe enfrentar su retiro y debe pensar en cómo ocupar el resto de su vida que sería mucho más larga que su vida deportiva. Esto es algo muy importante para los deportistas en general y los judokas en particular y espero que mi experiencia pueda ser de utilidad, para ampliar, aunque sea en mínima medida, las opciones posteriores al retiro y para que otros se animen a enfrentar nuevos desafíos.
En Japón, aún son muy pocos quienes tienen como profesión la gestión de dojos de Judo y espero que mi experiencia anime a otros judokas a emprender esta profesión de alto significado social y puedan seguir transmitiendo el encanto del Judo.
El caso de BANDO, es un caso inusual en Japón donde el emprendedorismo está poco desarrollado, menos entre las mujeres y mucho menos entre las judokas. Tal como se describió en la Nota anterior, para abrirse camino en un difícil mercado, BANDO introdujo distintas innovaciones para diversificar los servicios que brinda su dojo.
También, son muy interesantes la Página Web y la Página de Facebook, tanto por su presentación visual como por su contenido, desde donde BANDO despliega su estrategia de comunicación. En particular, la Página Web es muy completa y muy actualizada y permite a los interesados interiorizarse, en detalle, de los servicios que brinda el dojo para cada segmento, (1) niños de edad preescolar (de 3 a 5 años), (2) niños de edad escolar (6 a 11 años) y (3) adolescentes y mayores (mayores de 12 años) y la filosofía con que encara las respectivas actividades.
Así, por ejemplo, explica de la siguiente forma su pensamiento respecto de la práctica de los niños en edad preescolar:
Importancia del desarrollo físico en el período infantil
El desarrollo físico en el período infantil (hasta 5 a 6 años) tiene una importancia mucho más significativa que en cualquier otra etapa del desarrollo, debido a que tiene un sentido extremadamente dinámico que se encuentra profundamente conectado con la vida del niño a través de los juegos y no se trata de un simple desarrollo fisiológico estático. Se dice que, en este período, las personas amplían exponencialmente sus capacidades motrices y también, se conoce que existe una estrecha interrelación entre las capacidades físicas básicas y la motricidad fina de los dedos con las capacidades cognitivas y lingüísticas.
Además, aquellos niños que adquieren capacidades físicas como la fuerza y pueden mover libremente su cuerpo ganan en confianza y mejoran sus habilidades de comunicación y socialización. Así, con el movimiento del cuerpo y la comunicación a través del mismo, el niño activa el desarrollo del cerebro y la mente.
En el período infantil es muy importante fortalecer el cuerpo con su movimiento y las pequeñas experiencias de éxito en lograr distintos movimientos permiten desarrollar la autoafirmación o la autoestima en los niños.
Por ello, en nuestro dojo, dentro de los 90 minutos que dura una clase, se dedican unos 50 a 60 minutos al entrenamiento físico básico, poniendo particular énfasis en el fortalecimiento del torso y aprender a mover el cuerpo con libertad. Esto se debe a que tal, como se indicó más arriba, estamos convencidos que el desarrollo del cerebro y la mente se alcanza a través del movimiento y el desarrollo físico. Para ello, realizamos distintos juegos con carreras, saltos, rodillos, puentes, etc. en forma de competencias, de modo que los niños no se aburran y puedan mantener su atención. Últimamente, hemos agregado también algunos trabajos de “Entrenamiento SAQ”, de velocidad (speed), agilidad (agility) y rapidez (quikness) utilizando escaleras.
Asimismo, la práctica de las técnicas de Judo, desde los ukemi, los nage-waza hasta los katame-waza no sólo permiten fortalecer el tren inferior y el tren superior, sino también activan el sistema nervioso a través de la dirección de los kuzushi o la ubicación del pie en el primer paso de la ejecución.
Hemos adaptado el sistema aplicado por el entrenador del Rene WORMHOUD en el Club de Fútbol AJAX de los Países Bajos para el entrenamiento de los niños entre 7 y 12 años donde el 40% de los trabajos no tienen relación directa con el fútbol, incorporando también el Judo y la gimnasia. Allí, se entrena principalmente los distintos aspectos de la capacidad de coordinación, que están estrechamente relacionados con las capacidades atléticas básicas. Según WORMHOUD, en la práctica del Judo no sólo están incluidos los trabajos para mejorar las capacidades físicas básicas, sino también un componente de entrenamiento mental, a través del cumplimiento de las reglas y los códigos morales.
Además, el Judo, al tratarse de una actividad física con mucho contacto físico, especialmente en la práctica del newaza, facilita un apego seguro y el desarrollo socioemocional de los niños. Por ello, es que el Judo resulta muy efectivo en mejorar las conductas problemáticas de niños con trastornos tales como los Trastornos de Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), tal como se ha comprobado en distintos estudios científicos que demostraron la importancia del contacto físico en el desarrollo de la mente y el cerebro de los niños.
De esta forma, en la Página Web se pueden encontrar una gran cantidad de notas muy atractivas dirigidas tanto para padres interesados a enviar a sus hijos a practicar Judo, como para adultos interesados en hacer una primera experiencia en la práctica o volver a la práctica, tras muchos años sin hacerlo.
En uno de sus últimos posteos, BANDO hace referencia a la “magia del Judo”, en alusión a un término utilizado por un autor recientemente fallecido, como algo que sirve no sólo para la felicidad personal, sino también para la felicidad de otras personas y del mundo y enumera distintos ejemplos de la “magia el Judo” como los siguientes:
La magia de haber incrementado la fuerza y la capacidad de concentración como para enfrentar cualquier desafío que se presente.
La magia de haber ganado la confianza de otra persona por el sólo hecho de saber que ambos hemos practicado Judo.
La magia de poder hablar con los compañeros de Judo después de mucho tiempo, como si el tiempo no hubiera pasado.
La magia de sentir que se mantiene inquebrantable a lo largo del tiempo la relación forjada sobre un tatami.
La magia de poder hacer compañeros en todo el mundo, a través del Judo.
La magia de poder superar cualquier dificultad en la vida, después de haber competido en EL Judo.
La magia de ser respetado por el sólo hecho de haber dicho que practica Judo y mucho más, si es mujer y cinturón negro.
Así como lo hace la Sensei Mayuko BANDO, invito a todos quienes no conocen el Judo a experimentar su “Magia” con nosotros.
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