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El TATAMI, materia de investigación de Jigoro KANO.


Elemento fundamental para el Judo y materia de investigación de Jigoro KANO.

“TATAMI” (畳) es un término del idioma japonés que conocen gran parte de los practicantes de Budo del mundo en general y por los judokas en particular, ya que es la denominación que se utiliza para el piso donde se practica el Judo y algunas otras disciplinas.

El tatami forma parte de la cultura tradicional japonesa, ya que ha sido por siglos, el revestimiento de los pisos de las casas de Japón, siendo también un elemento fundamental en otras expresiones de la cultura japonesa como el Kado (ikebana) y Chado (ceremonia del té).

A diferencia de muchas manifestaciones de la cultura tradicional japonesa que tienen su origen en la antigua China, el origen del tatami es considerado netamente japonés que data del Período Heian (794 – 1185) utilizándose en un formato más delgado en viviendas de la época donde los dormitorios ocupaban el centro de las viviendas.

Posteriormente, en los Períodos Kamakura (1185 – 1333) y Período Muromachi (1336 – 1573), con el cambio del estilo de las viviendas en las que los escritorios o bibliotecas (shoin 書院)) se convirtieron en el centro de las mismas, los tatamis pasaron a cubrir prácticamente todos los pisos de las viviendas.

El uso del tatami en las viviendas, originalmente limitado a las casas de las familias aristocráticas y de los samuráis, en el Período Edo (1603 – 1868) se fue expandiendo en casi todas las viviendas urbanas. El uso masivo del tatami en la zona rural fue posterior y data de la Era Meiji (1868 – 1912).

Además, su forma rectangular, pasó a ser una unidad de medida de superficie de las habitaciones, aunque sus dimensiones varían según las regiones o modelos. Algunas de las dimensiones más usuales son: 985mm×1970mm=1,94045 m2, 955mm×1910mm= 1,82405 m2 y 910mm×1820mm=1,6562 m2.

Por otra parte, “TATAMI” (畳) significa también, en idioma japonés, plegar y apilar cosas semejantes.

Originalmente, los tatamis de unos 5 cm de espesor tenían un cuerpo o centro de paja seca de arroz comprimida recubierto por una esterilla de juncos (Igusa) llamada goza, pero en los últimos años, por problemas en la provisión de paja y la aparición de hongos y ácaros por el uso de la paja, se ha extendido el uso de material sintético como el poliestireno extruido y fibras blandas,

Sin embargo, junto con la revalorización de la cultura tradicional japonesa y el interés creciente en el mundo, existe también una revalorización del tatami tradicional fabricado con material natural, habiéndose comprobado distintos beneficios que aporta su uso que serán descriptos más adelante.

Tatami en kanji 畳. Arriba imgen de la luz de una estrella. Abajo imagen de carne apilada sobre la tabla.

-- Los tatamis utilizados en el Judo, si bien provienen originalmente de los tatamis utilizados en casas de familia de la época de su creación, fueron desarrollados exclusivamente para su uso en el Judo, tarea que fue iniciada por el propio Jigoro KANO, creador del Judo. --

Hace 10 años (2008), se han encontrado escritos de KANO sobre los estudios realizados para el desarrollo del tatami para el uso en el Judo.

Una de las primeras preocupaciones de KANO, fue el desarrollo de un tatami con la esterilla de cubierta suficientemente resistente para la práctica del Judo, ya que la práctica intensiva deterioraba rápidamente la esterilla superficial, especialmente por el corte de los hilos de las costuras longitudinales. Posteriormente, sus investigaciones abarcaron otros detalles tales como los demás materiales, métodos de fabricación, características de amortiguación, etc.

Para ello, contó con la colaboración de un artesano de la fabricación de tatamis de la Casa Imperial.

Así, encontró un hilo especial de fibra de cáñamo (Cannabis sativa) fabricado en un pueblo de la Prefectura de Nagano para la esterilla de cubierta que pasó a ser una de las características distintivas de los tatamis del Kodokan que además, llegó a contar con un artesano exclusivo para la fabricación de sus tatamis.

Debido a que los tatamis comunes utilizados para el Judo, especialmente en el interior de Japón, tampoco contaban con las características de amortiguación necesarias y en general, eran duras y pesadas y, a mediados de la década del 50, se empezaron a fabricar tatamis cubiertos con telas de polímero con una superficie rugosa que reproducía a la esterilla original y más tarde, el cuerpo de paja de arroz también fue reemplazado por material sintético.

Para el Primer Campeonato Mundial de 1956 realizado en Tokyo, ya se había generalizado el uso del tatami recubierto por material sintético, pero se optó por el uso del tatami recubierto con la esterilla de juncos (Igusa).

Según los entendidos, el tatami recubierto con la esterilla de juncos tenía una característica superficial tal que era muy resbaladizo en sentido longitudinal y rugoso en sentido trasversal y que muchos judokas virtuosos de la época aprovechaban esta característica para la aplicación de sus técnicas de proyección (nage waza) que, aparentemente, permitía aprovechar mejor la fuerza o impulso del adversario.

Uno de ellos fue el reconocido maestro Kyuzo MUFUNE (10mo Dan) quien prefería el “tatami tradicional” para la mejor aplicación de sus técnicas.

El reciente hallazgo de los documentos de Jigoro KANO sobre la investigación y desarrollo de los tatamis para la práctica del Judo, dio lugar a

un movimiento voluntario promovido por descendientes de un artesano de la fabricación de tatamis para restaurar los tatamis de Judo hechas con materiales totalmente naturales (orgánicos, de acuerdo al método de cultivo de arroz de la época). Así, se reprodujeron hasta el presente, 3 tipos de tatamis, a saber,

(1) tatami de la época de la creación del Judo,

(2) tatami desarrollado o mejorado por Jigoro KANO y

(3) tatami utilizado en los Juegos Olímpicos de Tokyo 1964.

El Tatami homologado por la Federación Japonesa de Judo (AJJF) difiere ligeramente con el de la Federación Internacional de Judo (IJF), especialmente en lo que hace a sus dimensiones. La AJJF sigue utilizando una de las dimensiones tradicionales de 182 cm x 91cm, mientras que las dimensiones establecidas por la IJF son de 200 cm x 100 cm.

Algunas otras especificaciones que fija la AJJF son: 6 o 5 cm de espesor, 0,4 a 0,7 de coeficiente de resbalamiento, 500㎏f・cm - 750㎏f・cm de absorción del impacto y 50G de dureza.

Si bien el avance de la occidentalización, especialmente después la Segunda Guerra Mundial ha hecho que el uso del tatami en las casas de familia decaiga notablemente, pero, a raíz del interés creciente por la cultura japonesa a nivel mundial por un lado y por otro, la actual tendencia a la valoración y preservación de la cultura tradicional impulsada por el propio Gobierno de Japón ha hecho que, en los últimos tiempos, se exaltara las virtudes o beneficios del uso del tatami tradicional recubierta por la esterilla de juncos (Igusa). Algunas de estas virtudes exaltadas, fundamentadas con investigaciones científicas, son:

a) Mantiene constante la humedad relativa de la habitación.

La esterilla de absorbe la humedad ambiente, cuando ésta es muy elevada y la irradia cuando es baja.

b) Purifica el aire del ambiente.

La esterilla de tiene la facultad de absorber el dióxido de carbono y el formaldehído del ambiente.

c) Posee un poder antibacterial.

La esterilla de posee una cualidad antibacterial contra bacterias tales como la Escherichia coli 0157, Staphylococcus aureus y de la salmonella.

d) Posee un efecto relajante.

El aroma del estimula el olfato y tranquiliza la mente.

e) Eleva la concentración.

Los ensayos realizados con estudiantes demostraron que las aulas con pisos de tatamis permiten mantener por más tiempo la concentración.

f) Absorbe los sonidos.

El tatami posee la cualidad de absorber los sonidos y contribuye a crear un ambiente silencioso.

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