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Juan Carlos Yamamoto (6to Dan)

La revancha de TAKATO y NAGASE.

Actualizado: 1 nov 2021

La revancha de TAKATO y NAGASE en los JJOO TOKYO 2020.


De las 9 medallas de oro obtenidas por los atletas japoneses en las pruebas individuales de Judo en los recientes JJOO de Tokyo 2020, hubieron 2 que tuvieron un significado especial por su carácter de “revancha” por las medallas de bronce obtenidas en los JJOO de Río de Janeiro 2016 que les significaron una frustración para ambos atletas que buscaban el oro olímpico.

Se tratan de las medallas de oro obtenidas por Naohisa TAKATO y Takanori NAGASE, respectivamente de las categorías masculinas de -60kg y -81kg. La medalla de oro de NAGASE fue la primera en la categoría obtenida por un atleta japonés, después de 21 años, desde que lo obtuviera Makoto TAKIMOTO en Sídney 2000, mientras que la de TAKATO fue la primera después de 17 años, desde que Tadahiro NOMURA obtuviera su tercera medalla consecutiva (récord inigualado) en Atenas 2004. Lamentablemente, no pudieron concretar su revancha Hisayoshi HARASAWA (+100kg) y Miku TASHIRO (-63kg) quienes, habiendo resultado 2° y 5°, respectivamente, en Río de Janeiro 2016, no lograron mejorar su performance en Tokyo 2020.

Tanto los propios atletas como los críticos y analistas resaltaron la gran “paciencia” con que ambos plantearon los combates, al que algunos analistas agregaron términos tales como “concentración “ y “determinación”, al ganar la gran parte de sus combates en Golden Score, dando muestras de la paciencia con que plantearon los mismos. Cabe destacar que “paciencia” fue un denominador común observado por los analistas en el planteo de los combates por gran parte de los medallistas japoneses, especialmente varones que despertó algunas críticas de una parte de los aficionados.

Si bien TAKATO llegaba considerado como el máximo candidato en obtener la medalla de oro teniendo en su haber 3 campeonatos mundiales (2013, 2017 y 2018) y 16 campeonatos entre World Masters, Grand Slam y Grand Prix ganados, en el caso de NAGASE, llegaba sólo como candidato a medalla en una categoría muy pareja y difícil, especialmente teniendo en cuenta que su único campeonato mundial ganado data del año 2015 y tuvo una lesión en su rodilla derecha durante el Campeonato Mundial de Budapest 2017 que lo mantuvo alejado por más de un año de las competencias, aunque logró ganar 4 campeonatos del World Tour durante el año 2019 sobre el total de las 9 ganadas en toda su carrera, incluyendo el Grand Slam de Osaka 2019 que fue clave para ser designado para los JJOO junto a sus antecedentes internacionales.


Takato y Nagase


Por otra parte, NAGASE es el máximo ganador de su categoría en el Campeonato Nacional por Categoría de Peso, con 5 campeonatos ganados (2014, 2015, 2016, 2017 y 2019), superando nada menos que al cuádruple campeón mundial de los años 70, Shozo FUJII quien lo sigue con 4 campeonatos ganados, mientras que TAKATO tiene 1 solo campeonato ganado (2015), teniendo en cuenta que ambos son nacidos en el mismo año 1993 (TAKATO en mayo y NAGASE en octubre). Así como la categoría de NAGASE es muy competitiva y pareja a nivel nacional (con rivales como FUJIWARA y SASAKI) como internacional, TAKATO tiene en Japón a uno de sus máximos rivales, Ryuju NAGAYAMA, 3 años más joven y surgido de la misma Universidad TOKAI con quien tiene un récord de 3 victorias y 3 derrotas y quien lo supera en la cantidad de campeonatos nacionales ganados (2).

A continuación, presentamos un breve análisis del estilo de ambos atletas, incluyendo un resumen de los comentarios sobre cada uno de los combates realizados por ambos en sendas entrevistas publicadas en el Portal Judo Channel.



Naohisa TAKATO

TAKATO es considerado por muchos analistas y su propio entrenador en la Universidad TOKAI, Kenichiro AGEMIZU, como un superdotado que adapta sus movimientos a los de sus rivales y puede elegir una técnica de acuerdo a cada rival. Tal es así que domina una amplia gama de técnicas y al mismo tiempo, tiene la facilidad de ejecutar técnicas que jamás haya practicado o improvisar tácticas en competencia sin haberlas probado en un entrenamiento. Además, es un gran estudioso de sus rivales, visualizando distintas opciones de defensa y contraataque según la forma en que lo ataquen.

Poseedor de una gran potencia y resistencia, hasta la época de los JJOO de Río de Janeiro 2016, desplegaba un Judo basado principalmente en su gran habilidad física y velocidad de reflejos que lo hacía asumir riesgos innecesarios. En los últimos tiempos, ha cambiado hacia un estilo más ortodoxo basado en el agarre tradicional de solapa y manga. Actualmente, despliega un Judo que prácticamente no presenta fisuras, con una gran variedad de técnicas tanto en el combate en tachi-waza como en ne-waza.

Si bien su tokui-waza principal es el kouchi-gari de izquierda que ejecuta en una gran cantidad de variantes, tanto para definir un combate, como para iniciar un ataque, tiene un amplio repertorio de técnicas desde el uchimata y el ouchi-gari de izquierda y el sode-tsurikomi-goshi y uki-goshi de derecha, hasta técnicas no-tradicionales poco utilizadas entre los japoneses como el yagura-nage (o uchimata invertido), el kata-guruma con agarre de manga y solapa del mismo lado (desarrollado al ser prohibido el agarre de piernas) o el seoi-nage invertido o coreano.

Según su entrenador de la selección, Minoru KONEGAWA, aprovechó el período de postergación de los JJOO de Tokyo 2020 para llegar a dominar casi todas sus técnicas de ambos lados (izquierda y derecha).

Sin embargo, ha demostrado cierta debilidad en competencias importantes a los que concurrió como máximo favorido, tal como ocurrió con las derrotas imprevistas en los JJOO de Río de Janeiro 2016 o los campeonatos mundiales de 2014 y 2019. En estas ocasiones, pequeños contratiempos o alteraciones en su rutina le provocaron una desconcentración que le impidió desplegar plenamente su Judo.

A continuación, presentamos los comentarios vertidos sobre los combates realizados en los JJOO de Tokyo 2020.

2° ronda: contra el belga VERSTRAETEN, por ippon con uchimata (3‘46“)

“Como el primer combate define la suerte de la jornada, afronté el combate con la idea de evitar cualquier tipo de errores. Si bien como todo primer combate estaba algo nervioso y tenso, pude plantear el combate con cierta tranquilidad, ya que tenía visualizado cómo responder a los ataques y la técnica con que lo definiría. Debido a que pude hacer un combate tal como lo había imaginado, tuve la sensación de que tendría una buena jornada”.

Cuartos de final: contra el georgiano CHKHVIMIANI; por acumulación de 3 shidos (7‘37“)

“Debido a que, en los anteriores JJOO de Río de Janeiro 2016, había perdido en esta instancia contra otro georgiano, sentía cierta inseguridad y temor. Así que me propuse plantear el combate con mucha paciencia con la táctica de esperar su agotamiento. Aunque muchos habrán pensado que, con esta forma de plantear un combate, provocaría también la acumulación de mi propio cansancio, terminé el combate muy tranquilo, con la suficiente confianza de poder plantear con éxito los combates con paciencia”:

Semifinales contra el kazajo SMETOV; por waza-ari con sumi-otoshi (11‘02“)

“Al tratarse de un rival con el que me enfrenté varias veces y con quien nos conocemos muy bien, me resultó muy difícil atacarlo. Planteé este combate también con paciencia y aproveché con un kaeshi-waza cuando sus movimientos se habían tornado algo desprolijos con el avance del combate”.

Final: contra el taiwanés YANG por acumulación de 3 shidos (7‘50“)

“A YANG lo había vencido en la final del Campeonato de Asia y Oceanía realizado en abril y como tenía la suficiente confianza de que no podría haber progresado tanto en estos últimos meses como para pudiera complicarme, pude desplegar mi Judo con cierta tranquilidad”.


Takato



Takanori NAGASE

NAGASE, a diferencia de TAKATO, despliega un Judo mucho más sobrio y menos espectacular. Su mayor fortaleza se encuentra en la gran estabilidad basados en la fuerza de los músculos del torso y la potencia de los músculos de piernas y cadera. Esto le permite trasmitir la fuerza aún estando lejos de su rival y atacar con efectividad aprovechando sus miembros largos. Esta fortaleza de los músculos del torso hace que también pueda defenderse y atacar a corta distancia. Aunque suele dar la sensación de que está en desventaja con el agarre, tiene una notable capacidad de revertir en un instante el agarre a su favor. Tiene la habilidad de dominar la manga de su oponente con su hiki-te a distancia y desde allí, ejecutar con efectividad una gran variedad de ashi-waza.

Su tokui-waza es el uchimata de derecha que inicia a distancia aprovechando sus miembros largos y proyecta inmovilizando a su oponente. El otro tokui-waza es el ouchi-gari de derecha ejecutado al momento del agarre en forma de ken-ken hacia adelante. Las otras técnicas que aplica con eficacia son ashi-guruma, osoto-gari.kosoto-gari y tai-otoshi todas de derecha y yagura-nage (o uchimata invertido) de izquierda.

A continuación, presentamos los comentarios vertidos sobre los combates realizados en los JJOO de Tokyo 2020.

2° ronda: contra el turco ALBAYRAK; por acumulación de 3 shidos (7‘16“)

“Como ya lo había enfrentado en varias oportunidades, sabía que se trataba de un rival fuerte y que tendría un combate complicado. Dado que tiendo a ponerme tenso en el primer combate, entré al tatami mentalizado en mantener, como sea, la concentración, cualquiera sea el rumbo que tome el desarrollo del combate. Si bien gané por acumulación de 3 shidos, pienso haber podido desplegar un Judo de ataque en avance”.

3° ronda: contra el italiano PARLATI; por ippon con ashi-guruma (3‘52“)

“PARLATI me había vencido en semifinales del Grand Slam de Tashkent de marzo pasado, así que planteé un combate de ataque constante, sin darle muchas oportunidades de ataque y a poco de la finalización del tiempo reglamentario, pude obtener un ippon con un ashi-guruma”.

Cuartos de final: contra el alemán RESSEL; por waza-ari con tani-otoshi (6‘46“)

Fue también un combate complicado, especialmente en el agarre. A pesar de tener 2 shidos en contra, pude mantener la frialdad y determinación y así, obtener un waza ari a los 2‘46“ del Golden Score”.

Semifinales: contra el belga CASSE; por waza-ari con seoi-nage (6‘48“)

“CASSE era el rival de mayor cuidado ya que acababa de salir campeón mundial en el último Campeonato Mundial de Budapest y tiene un Judo muy completo que domina tanto la larga como la corta distancia en tachi-waza y un gran dominio de kansetsu-waza en ne-waza. De todos modos, me concentré en la forma de plantear el combate y la táctica a seguir, como un rival más, sin fijarme demasiado que se trataba de un rival que venía con un fuerte envión anímico. En este combate también, entramos en Golden Score y finalmente, cuando avanzó para tratar de agarrar la solapa, afortunadamente, mi cuerpo respondió en forma natural ejecutando un seoi-nage con el que pude obtener un waza-ari”.

Final: contra el mongol MOLLAEI; por waza-ari con tai-otoshi (5’43)

“Tenía cierta incertidumbre, debido a que se trataba de un rival que nunca había enfrentado. Como pude estudiar su kata-guruma y pensar en la forma de neutralizarlo antes del combate, creo que pude plantear el combate con calma. Además, como se trata de un rival muy agresivo desde el comienzo del combate, pensé en aguantar la primera mitad y definir en la segunda mitad. A medida que avanzaba el combate, fui notando su agotamiento y sintiendo que podía vencerlo. Fue así que pude vencerlo, derribándolo una vez entrado en Golden Score”.


Nagase


De esta forma, hemos visto que tanto TAKATO como NAGASE han planteado los combates para asegurar la “revancha” con una táctica basada en la “paciencia”. Para que ello diera resultado, ha sido fundamental la gran preparación física y mental que les permitió mantener la concentración y la capacidad de respuesta, a pesar de que se extienda la duración del combate. En este sentido, especialmente en el caso de NAGASE que se caracteriza por su gran apego a largas sesiones de entrenamiento, se afirma que tanto la confianza propia como la de sus allegados se incrementaba a medida que se extendían los combates y avanzaba el agotamiento de los rivales.

Si bien la táctica de la “paciencia” adoptada por la mayoría de los atletas japoneses ha despertado algunas críticas, ha resultado la táctica más apropiada para asegurar las medallas, teniendo en cuenta que especialmente los atletas japoneses fueron objeto de un análisis minucioso por parte de sus principales rivales que tuvieron un “tiempo extra” para ello.


Kata-guruma y yagura-nage de Takato




Nagase

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