Maestros Japoneses en el extranjero reconocidos por la Federación Japonesa de Judo.
(Parte 1)
A partir de la presente Nota iniciaremos una breve serie sobre judokas japoneses que se encuentran en el exterior y que están siendo presentados a través de entrevistas publicadas en la Página Oficial de la Federación Japonesa de Judo (AJJF) en el marco del Proyecto “Ima motto tsuyoku nareru” (ahora puedes ser más fuerte). El Proyecto que cubre distintas temáticas tiene previsto presentar a 13 personalidades más prominentes hasta el 28 de octubre próximo, día en que se celebra el Día Mundial del Judo.
Cabe recordar que estas personalidades forman parte del Comité Internacional de la AJJF que reúne a un total de 27 de los judokas japoneses más destacados que se encuentran enseñando Judo en distintos países del mundo y la presentación de los mismos tiene como finalidad, por un lado, brindar un reconocimiento a su tarea de difusión del Judo en el extranjero y por otro, interesar a las nuevas generaciones para continuar con esta labor.
En la presente Nota, presentaremos a 3 personalidades que representan a 2 casos muy contrastantes. Por un lado, presentaremos a Hiroshi NAKAMURA y Hiroshi KATANISHI quienes han venido desarrollando una extensa trayectoria en Canadá y Suiza respectivamente y Tsuyoshi SHIMAOKA quien se encuentra radicado en Tanzania, uno de los países africanos más pobres del mundo. Los 2 primeros integraron equipos universitarios de elite y lograron ejercer su actividad como verdaderos profesionales del Judo en países desarrollados, mientras que el tercero es un aficionado del Judo que terminó sosteniendo el Judo de uno de los países más pobres del planeta, construyendo de su propio bolsillo dos Dojos y ayudando a sus alumnos más pobres, hasta dándoles trabajo.
Hiroshi NAKAMURA
Hiroshi NAKAMURA (1942), 8vo Dan de KODOKAN y 9no Dan de la Federación Canadiense de Judo, se encuentra en Canadá desde el año 1968 y está considerado como el “Padre del Judo Canadiense”.
NAKAMURA afirma que comenzó a practicar Judo a los 12 años en el KODOKAN donde tuvo oportunidad de asistir a prácticas dirigidas por grandes maestros como Kyuzo MIFUNE, Yoshimi OZAWA y Toshiro DAIGO (todos, 10mo Danes). Formó parte del equipo de la Universidad CHUO que, en ese entonces, estaba conformado por alrededor de 150 miembros y que tenía un horario de práctica de 15:00 a 18:00 al que asistían con frecuencias integrantes de otros equipos de universidades cercanas como MEIJI y NIHON. Dado que muchos graduados de la universidad que trabajaban en empresas como Nippon Steel, Asahi Kasei y Hitachi llegaban recién al Dojo pasadas las 17:00, las prácticas solían extenderse hasta alrededor de las 19:30. En ese entonces, el equipo de la Universidad CHUO era un equipo muy competitivo que contaba entre sus integrantes a grandes campeones como Isao OKANO y Shinobu SEKINE quienes integraban respectivamente la promoción siguiente y subsiguiente a la de NAKAMURA.
Tras egresar de la Universidad, en 1966, tuvo la oportunidad de viajar por 1 mes a Egipto, Sudán e Irán, enviado por el KODOKAN y el Ministerio de Asuntos Exteriores, para difundir el Judo en países de Medio Oriente, siendo esta experiencia la que despertó su interés en enseñar Judo en algún país del extranjero. Quien le ofreció la posibilidad de viajar a Canadá en 1968 fue Douglas “Doug” ROGER (1941 – 2020), subcampeón olímpico de la categoría pesado en los JJOO de Tokyo 1964, con quien había compartido muchas prácticas.
Según NAKAMURA, llegó a Canadá con 3 metas: formar medallistas olímpicos, hacer del Judo un deporte popular como el hockey y dejar una página en la historia del Judo Canadiense. Los primeros 2 años los pasó recorriendo distintos Dojos con contratos temporarios hasta que una lesión en una de las rodillas, su operación y la internación por 3 meses lo dejó prácticamente sin ahorros y a punto de regresar a Japón. Pero, con la ayuda de algunos alumnos, logró abrir su propio Dojo en la ciudad de Montreal, pero, hasta lograr ingresos suficientes, tuvo que seguir recorriendo colegios y universidades, enseñando Judo durante 6 a 7 horas diarias.
Aunque el Dojo tuvo un gran éxito reuniendo una gran cantidad de niños, le costaba mucho reunir jóvenes de la franja entre 15 y 20 años que más les interesaba entrenar. Especialmente con los niños, trató siempre de cuidar su seguridad, insistir en enseñarles la base y fijar objetivos de acuerdo a la capacidad y aptitud de cada uno. Actualmente, concurren al Dojo nietos de sus primeros alumnos y espera que pronto lo hagan algunos bisnietos.
Cuenta que, cuando llegó a Canadá (hace 52 años) existían 4 organizaciones distintas y que él pasó a ser miembro de la Asociación Canadiense de Cinturones Negros de Kodokan. Fue Director Técnico de la selección canadiense desde los JJOO de Montreal 1976 hasta los JJOO de Atenas 2004. Una de sus mayores satisfacciones fue la obtención de la medalla de bronce en los JJOO de Barcelona 1992 por parte de su discípulo Nicolas GILL (1972) en la categoría – 86 kg quien más tarde, obtendría la medalla de plata en los JJOO de Sídney 2000 (-100kg) y ser subcampeón mundial en Hamilton 1993 y 3ro en Chiba 1995 y en Birmingham 1999.GILL quien fue su alumno desde los 13 ó 14 años, es actualmente el Director Técnico de la selección canadiense y el Dojo “SHIDOKAN” de NAKAMURA funciona como centro de entrenamiento de la selección U-18. Entre sus discípulos actuales más destacados, se encuentra Arthur MARGELIDON, campeón panamericano en Habana 2012, 2do en Lima 2019 y 3ro en Edmonton 2015 (-73 kg).
NAKAMURA fue condecorado por el Gobierno de Canadá (Orden de Canadá; 2012) y de Japón (Orden dl Sol Naciente; 2019) y también, ocupa un sitio en el Salón de la Fama del Comité Olímpico Canadiense (2019), en reconocimiento a su extensa trayectoria.
Para quienes estén interesados a salir al extranjero para enseñar Judo, les recomienda, además de ser lo suficientemente fuertes en randori, contar con los conocimientos básicos tanto del Go-Kyo como de los Katas.
Hiroshi KATANISHI
Hiroshi KATANISHI (1952), 8vo Dan de KODOKAN, se encuentra en Europa desde el año 1974 cuando llegó a Francia y desde 1976, está radicado en Suiza. Inició la práctica del Judo estando en la escuela primaria y formó parte del poderoso equipo de la Universidad TENRI. Cuenta que, estando en el último año de la universidad que ya venía recibiendo todos los años a integrantes de la selección francesa, le fue ofrecido viajar a Francia para cubrir varias vacantes como entrenador. Fue así que viajó en 1974, junto con otros 3 judokas formados en la misma universidad, para trabajar como entrenador de la selección en el Instituto Nacional de Deportes (INSEP) donde también estuvo alojado durante el primer año. Entre quienes viajaron junto a él se encontraba Kiyoshi MURAKAMI (1950; 8vo Dan) quien actualmente se desempeña como Director General de la Selección Italiana.
Hiroshi KATANISHI
Estando en Francia, aceptó el cargo que dejaba el Sensei Kazuhiro MIKAMI (1939; 9no Dan) en el JUDO KWAI LAUSANNE de la ciudad homónima de Suiza donde permaneció hasta su retiro en el año 2017. Fue también entrenador de la selección femenina desde 1979, año previo al Primer Campeonato Mundial Femenino (Nueva York), hasta 1985. Recuerda que, en los primeros años, había muchas representantes con quienes debía trabajar desde la base, incluyendo la práctica de los ukemi. Esto hizo que siempre insista en sus clínicas y seminarios sobre la importancia de contar con una buena base.
Como sus discípulos más sobresalientes, destaca a Isabelle SCHMUTZ (1971) quien fue 8 veces campeona suiza en la categoría -52 kg y 2 veces representante olímpica, en los JJOO de Atlanta 1996 y Sídney 2000 y a Sergei ASCHWANDEN (1975), actual presidente de la Federación Suiza de Judo, quien fue medalla de bronce en los JJOO de Beijing 2008 y 2do en el Campeonato Mundial de Osaka 2003 y 3ro en Munich 2001 en la categoría -81 kg. Desde el 2013 hasta la fecha, se desempeña como experto de la Unión Europea de Judo y a partir de 2017, viene realizando seminarios dirigidos a la policía de Vancouver, Canadá (que abandonó la práctica del Taiho Jutsu para incorporar el Judo).
Tsuyoshi SHIMAOKA
Tsuyoshi SHIMAOKA (1963) llegó a la Isla de Zanzíbar que es una región semiautónoma de la República de Tanzania. Inició la práctica del Judo en un Dojo de barrio en la ciudad de Yokohama cuando concurría a la escuela primaria y siguió practicando en la escuela secundaria y en la Universidad de EHIME que abandonó a los 19 años para empezar a recorrer el mundo como periodista free lance. Siempre viajaba con un judogi para visitar los Dojos en los distintos lugares de destino.
Cuando llegó a Zanzíbar en 1987, algunos pobladores se enteraron que sabía Judo, por lo que le pidieron que les enseñara. Así, comenzó a enseñar en una playa, ya que no había tatami ni judogi. Estuvo durante 6 años bajo la vigilancia de la Policía Secreta ante la presunción de que podría estar entrenando a un grupo revolucionario y recién en 1992, al autorizarse la práctica de deportes de combate y no habérsele comprobado ninguna acción ilegal y ganarse la confianza de las autoridades, el Gobierno de Zanzíbar le cedió un terreno para que comience a enseñar Judo. Empezó a enseñar al aire libre hasta que, en el 2004, logró construir el Budokan en un nuevo terreno cedido con el material comprado por él mismo y la mano de obra aportada por sus alumnos. Asimismo, en el 2014, pudo construir un segundo Budokan en la Isla de Pemba donde comenzó a enseñar uno de sus primeros discípulos de Zanzíbar.
Entre ambas islas, reúne actualmente un total aproximado de 1.500 practicantes con edades que arrancan desde los 6 años, pero con una mayoría de varones entre 15 y 35 años, con muy pocas mujeres por tratarse de una población con mayoría islámica. En estos momentos, el Judo es el segundo deporte más popular en la isla detrás del fútbol, por haberse transformado en un deporte que brinda la oportunidad de viajar al exterior a quienes se esfuercen. En la actualidad, sus alumnos participan en los Campeonatos de África Oriental y en los Campeonatos Mundiales y además, SHIMAOKA logró que la Universidad JUNTENDO de Japón reciba 3 a 4 representantes de Zanzíbar cada 2 ó 3 años para entrenar durante 1 mes.
El Campeonato de África Oriental que reúne a los representantes de Burundi, Kenia, Ruanda, Uganda, Sudán del Sur y Tanzania es el campeonato regional más importante que el año pasado (2019) celebró su 12° edición de los que Zanzíbar que presenta un equipo separado al de Tanzania viene ganando en el puntaje general en las últimas 7 ediciones.
El último Campeonato Mundial de Tokyo 2019 fue el tercer campeonato en el que participó Tanzania con 5 representantes, de los que 3 eran de Zanzíbar y con SHIMAOKA como su director técnico. Éste reconoce que aún el nivel es muy bajo y por el momento, para los representantes africanos les resulta prácticamente imposible superar la primera ronda. A pesar de ello, considera que les resulta una experiencia de gran utilidad que les permite conocer la realidad del mundo.
Desde su radicación en 1987, SHIMAOKA ha iniciado distintos emprendimientos en varios rubros como la pesca y el transporte, tratando de crear empleo y así, contribuir al desarrollo de una de las sociedades más pobres del planeta con una tasa de desocupación que supera el 70% y una expectativa de vida de la población que no llega a los 55 años. En los últimos años, ha empezado también a promover y exportar principalmente a Japón pinturas del arte pop local “Tinga Tinga”.
Promoviendo el arte “Tinga Tinga”
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